Globalización, pandemia, cambios… renuevan el mundo del trabajo y plantean nuevos desafíos, especialmente para los jóvenes.
Dra. María Amalia Caballero, periodista. direccion@sembrarvalores.org.ar
Encontramos a Karin Eggers*, de Singular consultores, en uno de esos tantos conversatorios, webinarios y zoom o meet de los grupos más variados que multiplican en estos meses.
La conocimos cuando participamos en el Ciclo de Conversaciones sobre temas relacionados con los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible) y el mundo del trabajo, la ciencia y la tecnología.
Sus aportes inteligentes y realistas nos movilizaron a una charla: una a una y ella estaba dispuesta.
SV. Me gusta el nombre de la consultora: Singular
Karin Eggers: El nombre responde a nuestra filosofía de trabajo, buscamos lo singular en la diversidad.
¿Qué podés decirnos acerca de estos cambios que se aceleraron con pandemia?
Los nuevos aires, llegaron para quedarse. Va a ser muy difícil volver a la antigua “normalidad”. Y los jóvenes con sus valores tienen mucho que aportar a este nuevo estilo.
¿Cuál es tu visión respecto de la nueva situación en la cual se encuentran los jóvenes?
No me gustaría englobar a los jóvenes ya que hay realidades muy diversas.
Hay un patrón de mirada diferente entre las distintas generaciones. Concretamente, los jóvenes crecieron con sus necesidades más satisfechas que nuestros padres. Este bienestar fue gestando entre los más jóvenes una suerte de individualismo y hedonismo que se pone en tensión con contribuir a un colectivo, postergarse uno en función de los demás.
Al mismo tiempo tienen mayor libertad, son más desapegados con lo bueno y malo de eso.
Pienso que para poder construir es necesario compromiso, me ha pasado con equipos de trabajo, en el momento de mayor necesidad… se toman dos años de viaje por el sureste asiático… y me produce una reacción negativa.
Entonces se generaliza: los jóvenes no tienen compromiso social ni político… Pero es una realidad que hay que mirarla de los dos lados.
En Chile tuvimos el año pasado un estallido social protagonizado por los jóvenes de enseñanza media.
La nueva sociedad tendrá que encontrar la nueva manera de solucionarlo. Claramente no con el modelo que veníamos sosteniendo.
Están los grupos que se manejan en la lógica del hedonismo y otros que se van a jugar con todos los medios por su compromiso.
¿Destacarías algún condicionante en estas actitudes?
Por el área de trabajo con la comunidad de una empresa, trabajamos con jóvenes de un segmento socio cultural especial, jóvenes infractores de la ley. Ellos se movieron con el objetivo de alcanzar las zapatillas porque en «todos lados» les decíamos que eso era pertenecer, que con esas zapatillas serían más, pero su mamá estaba presa por la droga y su padre, no se sabía dónde estaba. En un contexto así, es difícil comprender el por qué del valor de la vida del otro, les daba lo mismo. Hoy moría uno por un balazo loco y otro día… esas diferencias son muy fuertes
¿Cómo ves ese cambio posible/necesario?
Tenemos que cambiar nuestra manera de actuar, tenemos que repensar nuestro modo de consumir. Las Empresas necesitan abrir espacios de participación. Esta pandemia ha sido un remezón para repensar también a escala personal y familiar. Hemos consumido menos y descubrimos que necesitábamos menos.
El modelo de acumulación de riqueza de agotó, vamos hacia el desarrollo a escala humana. La mirada omnipotente del modelo neoliberal de acumulación, como si los recursos fueran inagotables, acumulación de riqueza o capital, de manera lineal: produzco, vendo y genero ganancia. Eso ya no dio resultados, aumenta en taza de inequidad, agota los recursos naturales, influye en el cambio climático.
La mirada actual es más primitivas, incluso indígena, que produce lo que requiere, de manera más circular porque lo tienen incorporado en su modo de vivir diario, son parte de la naturaleza. Desarrollo a escala humana. Produzco de manera más circular, también en lo corporativo.
Necesitamos una mirada menos omnipotente y más sabia, necesitamos el aporte de esa sabiduría femenina.
Las mujeres tenemos mirada más sistémica, con relación a otra mirada más mono focal. Les nace más naturalmente no ven más que una meta y una variable. La vida nos ha demostrado que es más compleja y que necesitamos una mirada más sistémica, porque las mujeres por siglos y siglos nos hemos ocupado de la multifuncionalidad para abordar el mundo con su complejidad. No hay desarrollo sostenible posible teniendo afuera a la mitad de la población.
Justamente de esto habla el ODS 5 al proponer la mayor presencia de la mujer en la vida social y política.
Sí el ODS5 es uno pero, en los demás ha sido invisivilizado. Todos tenemos que cambiar, no digo que cambiaría las metas, pero es bueno mirar si se aplican, cómo se aplican e inyectar sentido de urgencia. Si se fracasa, corregir. Los ODS han contribuido a poner el tema sobre la mesa.
Aplaudo de los ODS la agenda transversal a la cual han adherido actores muy variados y en muchos países. Esto permite un lenguaje y un territorio común para conversar, dialogar, construir iniciativas para aportar a los poderes. Pero, considero que los tiempos han sido lentos, que hay poca rigurosidad en cómo medimos el impacto de los ODS. Esto permite a las organizaciones “vestirse” sin haber hecho el ejercicio de considerar si contradice algún Derecho Humano por ejemplo, contaminando, o su impacto en comunidades afectadas…
¿Cuál es el modelo que ves en la realidad pos pandemia?
Un punto que no puedo soslayar es el de incorporar la igualdad de género, multiplicar la presencia femenina en las organizaciones. Esto, está demostrado, aumenta la productividad, porque la mayor diversidad en los equipos trae más innovación, atracción y retención de talento. Son liderazgos más vinculados, adaptativos, con mirada sistémica inclusiva, que tiende a generar inteligencia colectiva por sobre los modelos autocráticos. Es verdad que las mujeres tienen, en general, una capacidad especial para llevar esa mirada diferente a la sociedad y a la empresa. Sin embargo no lo digo como algo exclusivo o excluyente, sino que estamos hablando de actitud abierta a desafíos adaptativos en entornos cambiantes en lo humano y lo social. Tiene que ver con Derechos Humanos, desarrollo social y estar en sintonía con las demandas de las empresas.
La mirada sistémica, abarcativa, la capacidad de adaptación, la flexibilidad, que necesitamos para construir, no es privilegio de las mujeres o de los varones, es una habilidad por adquirir y desarrollar en la vida personal, familiar, social y en las empresas.
*linkedin.com/in/karin-eggers-gutiérrez-5070912b @KarinEggersG
Especialista en Sostenibilidad, Empresas y Derechos Humanos.
[notification type=»information» title=»Singular Consultores»]Consultora chileno – uruguaya aborda tema que van desde la Transformación Organizacional, como Minería y sostenibilidad o participación de la comunidad. También los temas relacionados con género y conciliación familia y trabajo. Karin Eggers, karin.eggers@singularconsultores.cl wtsp +569 98867605[/notification]