Bebes
[Lactancia materna]
Muchas mujeres no vieron cómo se amamanta hasta tener a su propio bebé en brazos. Hay algo instintivo, hay mitos, hay aprendizajes. Despejemos dudas.
Stella Maris Lorato | Puericultora | stellalorato@gmail.com
[dropcap]L[/dropcap] as mujeres que han asistido a clases de preparación maternal y obtenido información acerca de la lactancia materna son más propensas a iniciar y amamantar a sus hijos. Por eso, vamos a compartir algunos datos que ayudan a las mamás cuando están por dar a luz y están inquietas sobre el tema.
Veamos algunas de las dudas más frecuentes
¿Qué ingerencia tiene el parto sobre la leche materna?
El parto es un acto tan importante en la vida de las familias que debería tratarse con todo respeto y dignidad. Es ¡nada menos! que la llegada al mundo de una nueva vida. No existe nada más poderoso en la tierra que una mujer dando a luz.
No es un acto quirúrgico, y cuando es medicalizado implica un buen número de intervenciones poco favorables para la madre y el bebé. Suelen tener distintas secuelas físicas dolorosas en el postparto que pueden entorpecer la lactancia materna. Por ejemplo, es difícil dar de mamar en posición correcta, cuando la mamá no puede sentarse por el dolor de los puntos de la episiotomía o después de la cesárea, cuando todavía está colocado el suero en sus venas y no puede moverse libremente, o está bajo los efectos de la anestesia epidural. Estas intervenciones pueden hacer que la mamá pierda control sobre su propio cuerpo y pierda confianza.
En el momento del parto
los profesionales deben
acompañar a la mamá,
estar ahí, observar, dar
apoyo y seguridad.
Por lo tanto, es aconsejable hablar con tu obstetra, contarle tus dudas y saber cómo va a ser el parto.
Si en el momento del parto la mujer segrega adrenalina, puede resultar más largo y doloroso.
¿Qué situaciones pueden disparar adrenalina en el cuerpo de la mamá?
• El frío; las salas quirúrgicas suelen ser frías para prevenir la proliferación de microorganismos.
• La luz intensa; la mujer se siente intimidada y observada.
• Vergüenza.
¿Cómo podemos ayudar a la mamá?
En el momento del parto los profesionales deben acompañar a la mamá, estar ahí, observar, dar apoyo y seguridad.
En algunos hospitales y clínicas están promoviendo los partos humanizados, respetando las necesidades de cada madre: libertad de movimientos, verticalidad y tiempo.
La tecnología es buena cuando se necesita, pero no en todos los partos normales.
En consecuencia, si facilitamos el parto, estamos ayudando a la lactancia materna.
[button link=»» color=»purple» icon=»» size=»large»]Cada mamá es única[/button]
Durante el embarazo se recomienda no explorar los pezones de las embarazadas, porque puede generar angustia y falta de confianza. Tampoco es necesario frotar, aplicar cremas, ni usar formadores de pezón.
Cada mujer tiene formas diferentes de pezones, así es la naturaleza.
Tengo el pezón muy pequeño, ¿podré dar de mamar?
Todos los pezones sirven. De hecho, los bebés se prenden de la aréola, no los necesitan para mamar, son una referencia visual y táctil para saber a dónde dirigir su boca.
[button link=»» color=»purple» icon=»» size=»large»]Tipos de pezón[/button]
Protáctil: son los que, a simple vista, se ven.
Umbilicados o invertidos: son los que, cuando se estimulan, se retraen.
Planos: ante un estímulo pueden sobresalir un poco.
Mis pechos son pequeños, ¿Tendré suficiente leche?
Todos los pechos, sean grandes o pequeños, sirven a la hora de alimentar al bebé. Si has tenido lactancias fallidas anteriores puedes consultar al respecto y evaluar por qué hubo h ipogalactia (baja producción de leche).
¿Por qué, durante el embarazo, no hay leche?
Durante el embarazo la progesterona y los estrógenos se encargan de impedir que la prolactina se desarrolle plenamente. Luego del parto, cuando bajan los niveles de progesterona y estrógenos, se activa la producción de prolactina. La separación de la placenta del útero es lo que marca el inicio de la lactancia. Durante el embarazo, el tejido glandular de los pechos produce calostro en pequeñas cantidades.
ES ACONSEJABLE HABLAR CON TU OBSTETRA,
CONTARLE TUS DUDAS Y SABER COMO VA A SER
EL PARTO
¿Cómo se produce la leche materna?
La succión del bebé estimula los receptores de oxitocina y prolactina que se encuentran en la aréola y el pezón. Se desencadena un impulso nervioso que llega al cerebro, donde el hipotálamo induce la producción de las dos hormonas estrellas de la lactancia: la prolactina, que se encarga de la producción de leche, y la oxitocina, que es la que desencadena la salida de la leche.
¿Todas las mamás fabricamos leche de calidad?
¡Sí! Según estudios realizados tanto en mamás con alimentación equilibrada y variada, como en mamás desnutridas, que viven en situación de pobreza extrema, se constató que ambas producen leche materna de calidad.
El cuerpo es tan sabio que, aunque comas mal, las células que se encargan de fabricar la leche se las arreglan para extraer todo lo necesario de las reservas maternas, para que no le falte ningún nutriente al bebé.
Me han hecho una cesárea ¿me va a tardar más en bajar la leche?
No, las cesáreas no retrasan la bajada de la leche. El comienzo de la lactancia se da en el momento en que se separa la placenta del útero y esto ocurre tanto en un parto vaginal como en una cesárea.
Lo que retrasa la bajada de la leche son las rutinas hospitalarias que suelen estar unidas a las cesáreas, por la incomodidad que puede sentir la madre para colocar al bebé al pecho a causa de tener la vía en el brazo o los puntos en el abdomen.
Después del parto me di cuenta de que tengo un bulto en la axila, ¿qué es?
Estos bultos se llaman glándulas supranumerarias, no constituyen motivo de alarma. Pueden presentarse en cualquier punto de la denominada “línea de la leche”, que recorre el cuerpo desde la axila hasta la ingle. Pueden crecer y segregar leche, no hay que apretarlos. Colocar frío, presionar y esperar a que desaparezca. El 1 % de las mujeres tiene este tipo de glándulas mamarias accesorias que pasan desapercibidas hasta el embarazo.
¿Qué son las bajadas de la leche?
A partir de las 42 horas postparto, se produce la primera bajada o subida de leche, como les guste decir, y muchas mamás notan que sus pechos se ponen tensos y a veces inflamados.
Posteriormente, algunas mamás van notando la bajada de la leche cuando ven a su bebé o lo escuchan llorar, sienten un hormigueo en sus pechos o un leve dolor; esa es la acción de la oxitocina que indica que la leche empieza a fluir.
Las mamás insulinodependientes, o con obesidad alta, pueden sufrir un retraso en el inicio de la producción de leche, hasta unas 72 horas, pero luego se va normalizando. Es importante que esas mamás lo sepan para no angustiarse.
Si sabemos que la leche materna siempre es buena y casi todas las madres producen leche suficiente, ¿por qué hay tantas mujeres que aseguran que no pudieron amamantar porque sus hijos pasaban hambre?
Es complicado encontrar una sola razón. La hipogalactia verdadera se da en pocos casos.
A veces se produce una hipogalactia aparente debido al mal manejo de la técnica de lactancia, frenillo corto del bebé (que no siempre las mamás pueden detectar), imposición de horarios para dar el pecho o recomendaciones contradictorias.
La mayoría de las mamás primerizas no han visto amamantar e ignoran cómo funciona la lactancia.
A veces esperamos que nuestros bebés nazcan sabiendo cuando es de día y de noche, que coman cada tres horas y que duerman entre toma y toma, cosa que no ocurre en la vida real. Los bebés, cuando nacen, no saben que están fuera de la panza de su mamá; por eso los consuela sentir sus brazos, su aroma y el latido de su corazón. Y, de nuevo, por desconocimiento, esas mamás acaban pensando que el niño llora porque tiene hambre y su leche no los llena. La leche materna se digiere más rápido que la leche de fórmula, que es más pesada para el organismo del bebé. Solamente para las leches de fórmula es válido lo de “cada tres horas”.