Nos tocó vivir una experiencia única. Ninguna de nosotras había pensado jamás que estaríamos cara a cara y mano a mano con la Primera Dama de los Estados Unidos y mucho menos que podríamos identificarnos tanto con ella.
[dropcap]E[/dropcap] l lugar está muy bueno, ya lo conocíamos porque vamos con el colegio cuando hay alguna muestra. Esta vez había mucha seguridad. Nos revisaron a todas, pasaron el detector de metales pero no nos bloquearon los celulares.
Nos entregaron a todas una caja con la bandera de Estados Unidos, una botella de agua y M&M de los colores de la bandera de Estados Unidos.
Resumimos esta vivencia en dos preguntas.
ERIKA
¿Cómo la viste o qué sentiste?
Me impresionó la manera en que se dirigía a nosotras, cómo nos hablaba, era una persona 
simple, normal, como… nosotras. A ella le costaba mucho hacerse valer delante de sus maestros, había mucho racismo y ella era una mujer de color, ¿cómo iba a llegar?
¿Cuál fue el mensaje que te dejó?
Que tengo que dejar de lado la mujer perfecta. Podemos superarnos a nosotras mismas aunque seamos de bajos recursos. Está en nosotras el llegar a ser eso a lo que aspiramos.
FLORENCIA
¿Qué sentiste?
Estoy muy contenta porque nos contó su historia. Ella vivía en un barrio como el nuestro -yo soy de la Villa 21- y su familia carecía de medios, sus padres no habían acabado el secundario, todo igual que nosotras. Nos hablaba desde el corazón, no es que nos hacía un resumen de algo.
Mensaje
Que se puede, que estudiemos, que nos esforcemos. Que se puede, que está en cada una. Que el apoyo de su familia fue fundamental.
CLAUDIA
¿Cómo… qué…?
Me resultó muy inspiradora porque yo quiero ser Presidente de la República Argentina. Desde el principio me llegó al corazón. Estaba muy emocionada; después cuando se mezcló entre nosotros para hacer las selfies, era una más.
Mensaje
Nos dijo que valoremos mucho lo que tenemos, que en otros lugares o regiones del mundo las chicas no pueden estudiar, ir al cole, pero acá sí. Aunque uno se queje porque es lunes (esto ya es mi reflexión).
Yo sé que tengo que acabar el colegio y después estudiar Derecho, Ciencias Políticas, tengo que trabajar.
Tengo mucha suerte de venir a este colegio que es privado y nos da muchas oportunidades que van más allá de las materias. Nos dan contención y orientación.
AGUSTINA
¿Cómo… qué…?
Vivo en el barrio de Barracas, en la Villa 21, aunque nací en Paraguay porque mis papás, que son argentinos, estaban allá por un tiempo. Me tocó vivir una experiencia única. No todos los días, ni a todos les pasa. Además eran las chicas de 4° las que iban al Centro Metropolitano de Diseño a escucharla y justo me tocó a mí entre las de 5º.
Fue muy inspiradora. Yo la considero una heroína por cómo moviliza a las mujeres.
Mensaje
Tomo que no hay que ser Presidente, cada una -desde su lugar- puede poner su granito de arena porque no hace falta nacer en cuna de oro para ser una gran persona.
Yo por ejemplo quiero ser profesora. Profesora de Inglés. Saber inglés me sirvió para hablar con la acomodadora para que nos pusieran adelante y también le pude decir a Michelle Obama que sea bienvenida al país y que era mi inspiración. Me dio las gracias y me dijo que «sea una buena mujer. Veo en ustedes grandes cosas».
Me impresionó que dijera que más de la mitad de las mujeres dejan el secundario y así no funciona.
En mi familia todos me veían por la tele, vieron cuando la saludé.
JOSEFINA DALLA VIA (21)
Economía, UTDT
«Volví hace unos meses de EE.UU. y todavía me emociono cuando veo y oigo respecto de ese país que ha logrado un desarrollo del cual nosotros estamos tan lejos. Más cuando ves a Barack Obama, el larguísimo camino que va desde un racismo extremo a un sistema republicano y federal funcionando. Así que cuando me invitaron a ir a su encuentro con jóvenes en La Usina del Arte me entusiasmé un montón.
Me hubiera gustado preguntarle, llevaba mis preguntas pensadas, fui de las primeras que levanté la mano. Pero además, al verlo tan cercano y empático, me daba ganas de dialogar con él cada uno de sus comentarios y respuestas.
La pregunta que más me gustó la hizo una chica de 16 años. Dijo que ya que somos todos tan iguales, que queremos lo mismo, ¿por qué es tan difícil que los líderes de los gobiernos se pongan de acuerdo?
Si me resultó la pregunta, mucho más, la respuesta: Obama nos tiró la responsabilidad a nosotros. Los políticos están pero deben responder a lo que quiere la gente. “Confío en que los jóvenes argentinos y estadounidenses estén a la altura de los tiempos que les toca vivir”. Dijo algo así y ¡me llegó!».