Los adolescentes y sus relaciones

La llegada de los hijos a la adolescencia supone un hito importante en la vida de los padres. Ese hijo necesita especialmente de nuestra cabeza y corazón. El especialista mexicano Armando Duarte, nos ayuda en este desafío.

Edición María Lescano – periodista

Armando Duarte, Presidente de Familias Fuertes, comparte cada semana en Facebook un tema para las familias. Esta vez se dirige directamente a los adolescentes. Es algo súper interesante para que padres y madres puedan acompañar mejor a sus hijos en este período tan especial.

¿A qué edad empieza la adolescencia?, ¿cuándo termina? No sabemos pero podemos percibir con cierta claridad que alguien está atravesando esa etapa de su vida.

El adolescente y sus amigos

Con bastante frecuencia, los adolescentes viven con sus amigos una relación de apatía. Cuando eran chicos hacían todos los programas juntos y se divertían mucho. En cambio ahora, si se encuentran, no saben qué hacer, se refugian en sus celulares.

El capacitador Duarte advierte que el desarrollo de relaciones humanas es indispensable para crecer, para prosperar. Los amigos son pieza clave en el Proyecto de vida.

Dado el valor que otorga a la amistad, hace algunas sugerencias para los adolescentes. Les propone pensar en esas personas conocidas con quienes los une alguna afinidad, con quienes tienen valores en común, compañeros de colegio (tal vez de otros colegios a los que concurrieron), de deportes, Sin embargo, son personas que en este momento de la vida, las van abandonando por apatía, por indiferencia, por costumbre, por creer equivocadamente que siempre van a estar ahí.

Para consolidar el proyecto personal, se requiere de una red de amigos, de relaciones que guarden un contenido.

Algunas veces, esa relación está quebrado porque hay heridas que no se han hablado. Llegaron al fondo del “baúl” y se hace difícil, traerlas arriba de nuevo para sanarlas.

No es fácil, ni tan frecuente que el adolescente esté atento a estas necesidades. Sin embargo, planear encuentros, invitar, es algo que a muchos les nace y a otros convendrá incentivar. A esta proactividad acompaña la actitud de participar cuando uno es el invitado.

A errores comunes soluciones prácticas

Así veo las propuestas que ofrece Duarte, si en el encuentro entre amigos predomina la apatía, hay caminos para convertirlos en momentos productivos y placenteros.

«Para sacudir esa actitud, necesitamos encontrar puntos en común que generen una conversación. Que sepamos de qué hablar, entonces, si vemos una misma serie, seguimos a un mismo influencer, o estamos leyendo los mismos libros, al estar juntos, física o virtualmente, tenemos la oportunidad de hablar acerca de eso, de qué temas, tratan y se logran conversaciones profundas, con contenido, que no es igual a aburridas.»

En una charla así, sale lo que pensamos, lo que sentimos, las emociones que esas escenas, esas personas, esas lecturas, etc. nos generan. Es una gran oportunidad de diálogo y que deja, a cada uno, el recuerdo grato de los momentos compartidos y, probablemente, seguirán pensando en esas cosas que ayudan a crecer.

En definitiva, se trata de dar contenido a esa convivencia, sin cerrar las puertas a nuevas relaciones.

Algunos crean un muro y se van aislando, están bien con los antiguos amigos pero no dan paso para llegar a alguien más.

La cercanía facilita la confianza.

Objeciones

Pero, de qué conversaciones hablamos, de qué relaciones… si están siempre metidos en el celular y, tal vez, relacionándose con personas del otro lado del mundo.

Es verdad, surgen nuevas y valiosas ciber amistades –con cuidados prudentes- sin embargo, cada uno tiene su contexto y necesita compartir sus emociones, aquello que “vivimos juntos” y que para otros no tendrá valor.

La cercanía facilita la confianza, y es nuevamente Duarte quien advierte que esa confianza, que hace valiosa a la amistad, se conserva con quienes compartimos valores, y pone un ejemplo: si se buscó la “picardía” la mentira, la diversión a costa de otro, esa relación generará distancia porque, “si hoy le miente a este, mañana me miente a mí”, entonces…

Estas son apenas, algunas de las ideas que nos va dejando el profesor Armando Duarte. Pueden acceder a este video en nuestra Facebook Sembrar Valores en familia.

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