Lic. Adriana Ceballos, Lic. Georgina AZocar @coachingdefamilia
Impensado. En pleno siglo XXI nos encontramos frente a una guerra armada. Y a nuestros niños, a los que educamos en el amor, en la no violencia y todo aquello que los potencie y les genere calma, cómo explicarles decisiones tan escalofriantes y tristes?
¿Cómo hablar de la guerra con los niños? ¿Cómo podemos los padres cuidar sus corazones, sus vidas?
Hablarles de la guerra es necesario en la medida que preguntan, según las edades y su forma de ser.
Conviene abordar con empatía, explorando primero qué es lo que conocen y apuntando a aquello que quieren saber específicamente y les genera curiosidad, con un lenguaje adaptado a su comprensión.
La información excesiva y las noticias en los medios, es mejor evitarlas, algunas imágenes pueden dañar su corazones.
Desde un estado de tranquilidad y esperanza, podemos contarles que dos países lamentablemente no se han puesto de acuerdo a través de las palabras y «para encontrar una solución» han decidido el camino de la violencia -que nosotros no apoyamos. Remarcar que esta actitud no los llevará a ningún final positivo, es tan importante, como decirles que el conflicto va a terminar.
Podemos utilizar este contexto para explicar cómo cada uno de nosotros, desde nuestro lugar, puede propiciar la Paz. Resaltar la importancia de la actitud individual, y en el día a día, para hacer del mundo un lugar más generoso, empático y menos hostil. Con ejemplos simples y sencillos que puedan poner en práctica en casa, en la escuela, con los hermanos y amigos.
También estar atentos a validar sus sentimientos que pueden ir desde el miedo hasta el estrés y la ansiedad. Contale qué hay personas que se están ocupando de resolver estos temas y que también hay otras muy solidarias y comprensivas que colaboran brindando su apoyo.
Si te parece, según sean tus creencias, ofrecele la alternativa de rezar o meditar.
Fotos de la inolvidable película de Roberto Benigni.