«No estoy de acuerdo con lo que dices, pero defenderé hasta la muerte tu derecho a decirlo» – Voltaire
Dra. María Amalia Caballero – Periodista – @mariaamalia.caballero9
En estos tiempos de elecciones, cuando se llega al momento del balotaje, algunos lo tienen muy fácil porque para ellos no es más que repetir el voto inicial. Para otros llega el momento de preguntarse ¿qué hago?
Entonces, es frecuente oír hablar del mal menor, hace tiempo me explicaron que es triste elegir el mal por muy menor que sea… un ciudadano en democracia elige el bien posible. Dado que es imposible encontrar la perfección en ninguna posición política.
Recibimos el newsletter del instituto ACTON* con reflexiones interesantes para compartir aquí algunas de las ideas que plantea David Gallegos en su artículo.
En democracia se elige el bien posible.
PLURALISMO
Por vivir en democracia, es decir en una sociedad plural, necesitamos aprender a ser respetuosos y abiertos a las diferentes formas de pensar y creer. Es una sociedad donde, por un lado, quien desea compartir su fe con otros tiene el derecho de hacerlo con respeto hacia quien no está interesado en escuchar ni adoptar esa fe. A su vez, no cabe la actitud de menosprecio a las creencias de otra persona porque no se comparten.
En definitiva, se trata de practicar mutuamente el respeto y la comprensión de los demás porque el pluralismo implica que valoramos y aceptamos la diversidad y las diferentes opiniones dentro de una sociedad.
El pluralismo requiere consenso del derecho de conciencia, para elegir lo que se cree más afin a las convicciones personales y a la autorrealización de cada persona.
TOLERANCIA
El concepto de tolerancia implica que sin estar de acuerdo con las creencias y los valores de otros, se respetan porque privilegiamos vivir en paz y armonía, a pesar de nuestras diferencias. La tolerancia es una herramienta esencial para lograr una convivencia armoniosa en una sociedad plural. No necesitamos practicar la tolerancia con quienes ya estamos de acuerdo y nos identificamos con valores comunes. La tolerancia es de doble vía, lo que implica ser respetados y respetar valorando las perspectivas o creencias de los demás.
Es un dar y recibir.
RELIGIÓN
En una sociedad libre, la fe es una parte integral de la identidad de las personas. Creyentes y no creyentes tienen igualdad de oportunidades para participar en la política sin ocultar sus convicciones. La iglesia, al defender la igualdad de derechos, contribuye a la construcción de una sociedad más justa en la cual candidatos religiosos o ateos participan activamente en la política para contribuir al bien de la sociedad.
Para contribuir al bien de la sociedad
La tolerancia hacia la fe de los demás significa respeto y aceptación, aunque no se compartan las mismas ideas. Tolerar la diversidad no significa dejar de creer. Cada persona tiene derecho a mantener sus propias creencias sin sentirse presionada a cambiarlas. Mucho menos a verse obligada a negar sus convicciones o renunciar a su conciencia, por el sometimiento a grupos de presión política o redes religiosas violentas.
El pluralismo es como tener un equipo de diferentes personas, cada una con sus talentos y habilidades únicas. Así como se valoran las diferentes fortalezas de cada miembro del equipo, en una sociedad liberal, se aprecian y respetan las diferentes creencias religiosas y formas de vida de las personas.
- * newsletter del Instituto Acton trae un interesante artículo de David Gallegos Profesor en #Studentforliberty con un tema de especial interés en períodos de elecciones. ¿Ser liberal es oponerse a la religión? – David Gallegos