Gracias MDZ, gracias Víctor Balzeiro por este testimonio de madre, “casi los dejo sin goleador” dice Mónica Ferrero.
Editó: María Lescano – periodista
Embarazada a los 14 años, hace 40… ese embarazo era una vergüenza, te señalaban con el dedo. Vendrían muchas consecuencias negativas… ¿cómo decirlo a sus padres?, ¿cuál sería su reacción?, el resto de la familia también opinaría, había que dejar de ir al colegio… cuándo y cómo decirlo. El papá tenía 16 años y como novios estaban los dos bien.
Una amiga, con la que compartían mucho en ese tiempo, también estaba embarazada y decidida a abortar. En un momento, se acababa todo, era secreto, nadie se iba a enterar.
Fueron juntas con sus novios a hacer el aborto pero Mónica no estaba tranquila: “el nene” ya está aquí se decía. En esos años de estas cosas no se hablaba, nadie te explicaba lo que pasaba en ese momento, no los riesgos que corrías. Eso sí, había visto una película en el colegio en que mostraban cómo sacaban el niño en pedacitos, cuenta.
Su amiga entró primero, y cuando llegó su turno, ya acostada en la camilla, cambió la decisión: «ya está, lo tenés y listo, no lo mates, Dios proveerá». Entonces le dijo al médico: “No lo quiero hacer, no estoy preparada”. El médico entendió y aceptó su decisión. Su novio la tomó de la mano para dejar claro “estoy con vos”.
Sus suegros se hicieron cargo, Mónica se fue a vivir a con sus suegros, abandonó por unos años el colegio y comenzó a trabajar en una panadería.
A los 55 años, es maestra jardinera y maestra de adultos jubilada y trabaja martillera y es muy feliz por su hijo Fernando, la familia tan linda que formó.
“Casi los dejo sin goleador” 112 goles…, dice Mónica con humor y así titula MDZ la nota de @balseirovictor