Por María Amalia Caballero – Dra. en Comunicación Pública . direccion@sembrarvalores.org.ar
Hilda Molina, es una prestigiosa médica cubana que durante 35 años creyó en la revolución castrista. Hoy nos advierte.
Cuba es nuevamente noticia. Sublevaciones en distintos puntos del país, marchas en las que piden Libertad y Vida. Después de casi 60 años viviendo bajo un régimen totalitario, Cuba se despierta y dice «basta».
Nosotros no sabemos ni podemos predecir cuál será el éxito de estas acciones pero, Hilda Molina, antes del llamarse a un silencio autoimpuesto debido a la utilización partidaria que se hizo de su mensaje, nos advierte«nosotros no sabíamos cómo era, Ustedes están ‘avisados‘. Es su manera de decirnos que no tenemos excusas, si queremos vivir en un estilo de vida de libertad y valores.
Nosotros no sabíamos cómo era, Ustedes están ‘avisados’
.Hilda Molina
Ideología
Después de militar dudrante 35 años al lado de Fidel Castro poniendo su capacidad profesional -investigadora neurocirujana- hasta crear un centro de excelencia en La Habana en contacto con los mejores especialistas de distitntas partes del mundo, Hilda renunció a sus cargos en el Congreso, a la dirección del Centro, a todo lo que había construido, ¿por qué? porque descubrió la gran mentira que se escondía detrás de «Un hospital para los ricos que pagan en dólares».
Le duele la ostentación de riqueza y corrupción a costa del hambre de su pueblo. Le duele que los centros de salud no sean para los cubanos. Le duele el sufrimiento de tantos católicos perseguidos y humillados por no someterse a la imposición de una ideolgía incapaz de crear la felicidad que promete.
Humillados por no someterse a la imposición de una ideolgía
Pedí perdón en primer lugar a mi madre, mujer católica y excelente diseñadora de alta costura que tuvo que desprenderse hasta el útlimo corte de tela, hasta el último equipo por no doblegarse. Mi madre entre lágrimas acompañó mucho a la mujer cubana y me acompañó siempre.
Siente la necesidad de pedir perdón a los cubanos residentes, a los exiliados y auto exiliados, por que sin participación material en los hechos, se sabe cómplice de lo que ocurría.
Cuba hoy
Las marchas en las que mis compatriotas arriesgan su vida y su libertad, tienen que ser un despertador para toda América Latina que está siendo engañada con ideologías lejanas a su cultura, que están viviendo el engaño de una presión ejercida desde los gobiernos y en los medios de comunicación que, muchas veces son cómplices.
Con Hilda nos une una amistad, compartimos distintos momentos, la entrevistamos cuando estaba recién llegada al país y cuando fue honrada en la legislatura porteña por su compromiso con los Derechos Humanos, cuando presentó la colección de moda diseñada por su madre… Hilda tiene, de nuevo, mucho para decirnos.
Abrir la cabeza y escuchar al corazón, es lo que me queda del mensaje de Hilda, ¿qué clase de país queremos ser? Ella nos deja entrever distintos tipos de complicidad,