Cerrando el mes de concientización para prevenir el cáncer de mama. Paola Calcagno

Paola Calcagno viene superando el cáncer de mama y ofreció su testimonio a Fundación Sales. Conversamos con ella.

Por María Amalia Caballero, Dra. en comunicación pública – direccion@sembrarvalores.org.ar

Paola siempre fue una mujer que solía hacer sus controles periódicos, en 2014 le encontraron micro calcificaciones benignas en la mama derecha que fueron eliminadas con una punción, su vida siguió tranquila y normal.

Es trabajadora social y entre otros lugares de trabajo está en una escuela para adultos con discapacidad. No es una escuela propiamente, aunque se llama así, y algo más parecido a un taller tienen una huerta, clases de cocina. Las actividades se acomodan al número y perfil de los participantes.

Un par de años después en 2018 le encontraron un carcinoma lobulillar de la mama izquierda. Cuando le entregaron los estudios los llevó a su ginecóloga que es también su amiga . Le indicó que lo hiciera ver por una experta patóloga mamaria. En seguida la operaron en el hospital oncológico Maria Curie de la Ciudad de Buenos Aires.

Tuvo después un tratamiento de rayos y desde entonces continúa con controles cada tres meses: ecografía, mamografía y hemograma.

Todo viene muy bien, y Paola sigue su vida normal junto a su madre y sus dos hijos.

Fundación Sales

La mamá de Paola es donante habitual en Fundación Sales que trabaja bajo el lema Cáncer ConCiencia.

Paola está muy agradecida por el trabajo que hacen y pensó que ella tenía una buena experiencia para compartir y algo lindo que contar.

Paola nadadora

Desde chica a Paola le gusta ir a nadar a la pileta y durante algunas temporadas lo hace con cierta regularidad. Durante el pos tratamiento le resultaba más fácil hacer los ejercicios en el agua, y muchas veces también nadar.

En esas estaba cuando surgió el desafío: nadar en aguas abiertas. Fue un día a navegar por el Delta todo era tan atractivo.

Y llegó el concurso: 1500 inscriptos, nadadores de distintas categorías con metas diferentes, pero había que animarse a las aguas abiertas y fue en Pilar. No buscaba ganar, quería ser ella quien alcanzara una meta y así fue, nadó 500 metros en 21 minutos… feliz orgullosa: ¡Meta lograda!!

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