Recomendación: Borgen es una serie de muy buena calidad que se estrenó hace años. Ahora las tres temporadas están disponibles en Netflix.
Es una serie de ficción danesa que narra las interioridades de la política, través del personaje de Birgitte Nyborg, que se convierte en la primera mujer en alcanzar el cargo de Primer Ministro.
“Borgen” es el término coloquial con el que se conoce al palacio de Christiansborg donde funcionan los tres poderes del estado incluida la oficina del Primer Ministro. La serie detalla el desempeño del poder por parte de Nyborg, su paso por la oposición, y la relación entre los medios de comunicación y el poder político, que se condicionan mutuamente.
La serie tiene tres temporadas de diez episodios cada una, emitidas en otoño de 2010 y 2011, y a principios de 2013 respectivamente
Dirección: Louise Friedberg y ocho más.
Elenco: Sidse Babett Knudsen, Birgitte Hjort Sørensen, Pilot Asbæk, Benedikte Hansen.
Género: Político
Duración: 3 Temporadas de 10 Episodios, de 58 minutos.
Público adecuado: Adultos.
Erotismo medio.
No violencia.
Consumo de alcohol en exceso.
Calificación técnica: Excelente
Comentario:
Fascinante juego de poder, seducción, medios de comunicación al servicio del poder de turno y escrutando la vida privada de las figuras públicas, asesores de campaña con problemas que arrastran desde la niñez.
Es notable el empoderamiento de la mujer en épocas en que ese no era un tema prioritario.
En cada episodio hay una cita, la mayoría fueron tomadas de “El Príncipe” de Maquiavelo, un maestro de políticos y muy estudiado por la Ciencia Política por mostrar todo lo que se esconde en los sótanos del poder.
Primera Temporada Birgitte Nyborg se presenta a elecciones. Se transforma en Primera Ministra y resigna su vida privada. Notablemente siempre acompaña a sus hijos.
Segunda Temporada sigue en el poder pero comienza a perderlo. Su vida es caótica y sus adversarios se aprovechan.
Tercera Temporada cambia totalmente el registro, sin embargo vuelve al poder por su gran carisma y honradez.
Las actuaciones son excelentes, muy precisas y adecuadas a cada personaje. En conjunto las dos primeras temporadas funcionan con un mecanismo de relojería. La tercera desconcierta en un principio pero el final es totalmente imprevisto.
Hay que tener en cuenta que no se puede resumir en una crítica todo lo que viven estos personajes, eso es una señal de que nos acompañan más allá de la pantalla.