DEJAN DE ODIAR, CUANDO DEJAN DE IGNORAR

jóvenes

 

Sofía (22) estudia Administración en la UBA pero es, por sobre todas las cosas, una mujer a quien le apasiona el mundo en que  vive, en que vivimos.

 

[dropcap]R[/dropcap] econocer lo inevitable del cambio en vez de repelerlo, atender a la necesidad de la actualización constante, aprovechar al máximo los beneficios de la globalización y el avance tecnológico son los grandes desafíos de la educación en el siglo XXI. Es más productivo cuando el principal disparador son los interrogantes y se amplía el rango de respuestas
posibles de la mano de internet. Como explica el investigador indio Sugata Mitra, “hay que proveer el medio y las herramientas para que el aprendizaje suceda, dejar de imponerlo. La curiosidad y el cooperativismo, que abrazan la diversidad, deben ser el principal motor del desarrollo”.

[button link=»» color=»blue1″ icon=»» size=»large»]  Sumar o restar  [/button]
Hoy suman las diferencias, la autenticidad, el pensamiento lógico y sistémico, el espíritu emprendedor.

Personalidades chispeantes y pasiones de todos los colores son la mayor fuente de originalidad. Individuos con iniciativa y determinación, con el valor de pensar lateralmente, ni espectadores ni marionetas: el objetivo del sistema educativo debe ser contribuir con formar protagonistas conscientes, partícipes en la sociedad y líderes de sus propias vidas.

[button link=»» color=»blue1″ icon=»» size=»large»]  Demasiado lejos  [/button]
Ante los grandes enemigos globales de la paz y el desarrollo, tendemos a quedarnos en la impotencia y la crítica pasiva. El panorama no es simple, es verdad.

HAY CANTIDAD DE DATOS QUE NO SABEMOS
ASOCIAR, CANTIDAD DE COSA QUE NO
ENTENDEMOS Y QUE, COMO TENER UNA
CONSCIENCIA ACTIVA ES AGOTADOR, NO NOS
ESFORZAMOS POR ENTENDER

El volumen de información crece exponencialmente, consecuencia de este mundo cada vez más interconectado y dinámico, superando nuestra capacidad para abarcarlo todo. Tal vez creemos saber mucho, tenemos acceso a miles de fuentes que multiplican nuestras posibilidades. Posibilidades que contados antepasados sólo se atrevieron a soñar. Pero el bombardeo de estímulos nos distrae de lo más importante: hay cantidad, pero no calidad.

Hay cantidad de datos que no sabemos asociar, cantidad de cosas que no entendemos y que, como tener una consciencia activa es agotador, no nos esforzamos por entender.

Hay quienes se nutren de las consciencias dormidas, fáciles de manipular, o al menos de confundir. Nos quedamos en papel de espectadores porque todo parece ajeno, no importa cuánto pueda preocuparnos la situación: problema y solución siempre están demasiado lejos.

[button link=»» color=»blue1″ icon=»» size=»large»]  ¿Un lujo?  [/button]
Quienes podemos darnos el lujo de proyectar a largo plazo, necesitamos entender lo clave de enfocarnos en promover la educación como pilar fundamental en la lucha no violenta contra los grandes vicios de la comunidad global. Es igualmente necesaria una revisión de objetivos, y la consecuente actualización de los métodos de aprendizaje y el rol de la enseñanza.

Nos urge llenar las grietas que dividen. Las diferencias enriquecen, la gente inteligente las celebra. La cercanía entre sociedades de culturas radicalmente distintas, gracias a internet y las telecomunicaciones, ayuda a que se derriben paradigmas que conservan o, peor aun, cultivan el odio. Las ideologías que temen y rechazan lo diverso y son fuente de  estereotipos falsos, son las peligrosas. Dogmas que se basan en el miedo, la imposibilidad del acceso libre a la información, la ausencia de la capacidad de procesar información con criterio propio.

[button link=»» color=»blue1″ icon=»» size=»large»]  Objetivos ambiciosos  [/button]
La ignorancia es el arma del terror: es muy fácil odiar o temer lo que no se conoce. Por eso, paralelamente al avance de la globalización, hay que forjar una mentalidad de apertura.
Perseguir objetivos más ambiciosos: enseñar a pensar con libertad, enriquecerse de lo nuevo y diferente, enseñar a escuchar, atender la curiosidad, explorar y descubrir, a tomar las riendas de la propia vida y no quedarse sólo con la primera respuesta.

Podrán leerme exageradamente optimista, danzando dentro de la belleza de una utopía. Y tal vez, todo sea sólo cuestión de no dejarse intimidar por las utopías. Hacer de ellas nuestro horizonte, y empezar a caminar

 

[notification type=»note» title=»Para leer más»]

-«Learning about the world makes it smaller. Learning about people who are great distances away brings them closer. Learning about enemies offers a chance for improving relations. Fully comprehending the forces behind human inequality gives us the capacity to achieve maturity and to help forge the capstone of civilization.»

– De «The rapture of maturity», Charles Hayes -“This is where most people live. In today. Curiosity is a luxury saved for those with a long-term outlook of life. Most people don’t have time for curiosity. Whether that’s because they struggle with medical conditions, or depression, or social insecurities, or boredom, or isolation, or financial struggles, most people can’t think about tomorrow. They are struggling with today, every day.”

– De «The role of curiosity in a collaborative world», Carlos Micelli

Libros:

“Tres tazas de té”, Greg Mortenson.
“Focus: el motor oculto de la excelencia”, Daniel Goleman.

Charlas TED:

“Build a school in the cloud”, Sugata Mitra. https://www.ted.com/talks/sugata_mitra_build_a_school_ in_the_cloud?language=es

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