La persecución en Medio Oriente es una realidad, un hecho innegable y a estas alturas, algo ante lo que no queremos ser indiferentes.
Arantxa Escribano | Periodista | arantxaescribano.724@gmail.com
[dropcap]E[/dropcap] stamos en un momento histórico sin precedentes. El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) dio a conocer un informe donde registraba más de 65 millones de desplazados, lo que equivale a la población que tiene el Reino Unido, por citar un dato para dimensionar la cantidad. Los agentes que intervienen en este problema son muchos, principalmente, factores políticos y religiosos.
[button link=»» color=»bordeaux» icon=»» size=»large»] Nueva York [/button]
Durante el mes de abril tuve la oportunidad de presenciar una conferencia en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York. Era la primera vez que se hablaba oficialmente acerca de la persecución religiosa. Misioneros, víctimas, familiares de personas asesinadas, representantes de instituciones y gobiernos compartieron sus experiencias. Personas que fueron exiliadas, maltratadas, discriminadas e incluso secuestradas debido a la fe que profesan.
En una iniciativa impulsada por la Santa Sede y las organizaciones Más Libres, Citizen Go y Hazte Oír, estas personas lograron entregar al Secretario General de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, un manifiesto con más de 500.000 firmas para que se reconozca como genocidio la muerte de los cristianos en Siria e Irak. En el Reino Unido ya está reconocido por la Cámara de los Lores y en EE.UU., por la Corte. El reconocimiento por parte de la ONU significaría dar protección a las víctimas y exigir responsabilidades penales y civiles.
[button link=»» color=»bordeaux» icon=»» size=»large»] Testimonio y testimonios [/button]
Personalmente, escuchar el testimonio de los Muller, padres de una voluntaria estadounidense asesinada por el ISIS en Siria; o el de Samia Sleman Kamal, una niña yazidí de 15 años secuestrada y violada reiteradamente por el mismo grupo, que explicó en árabe y bajo sollozos cómo había sido abusada y cómo habían matado a su padre ante sus ojos, fue una experiencia aterradora. No hubo una sola persona en la sala que no se quebrara frente a la valentía y entereza que mostraba esta niña convertida en mujer a la fuerza. Gracias al trabajo de Jaqueline Isaac, la vicepresidenta de Roads of Success, una organización que denuncia abusos y ayuda a las mujeres que lo han sufrido proporcionándoles una nueva vida e identidad, Sleman pudo salir adelante.
ES ALGO QUE TRASLADA EL RECUERDO
A LOS PEORES MOMENTOS DE LAS
DOS GUERRAS MUNDIALES ALGUNOS
PERDONANRON, POCOS OLVIDARON
Las atrocidades que día a día desde hace más de cinco años se viven en Siria trasladan el recuerdo a los peores momentos de las dos guerras mundiales. Algunos perdonaron, pocos olvidaron.
Hablo de Siria pero podría incluir en las imágenes que aparecen en la cabeza de cualquiera de ustedes las de niños en las costas de Lesbos, o en Etiopía, Irak, Pakistán o Sudán.
El trabajo que realizan las ONG no alcanza para cubrir las necesidades de las miles de familias y personas desamparadas que huyeron de sus hogares a la fuerza. Cada una de esas caras que al hablar del tema “refugiados” y “Oriente Medio” se nos viene a la cabeza, tiene nombre y apellido. Tenían una vida digna y un futuro por construir.
Los voluntarios independientes juegan un papel fundamental para la contención de estas personas en los campos de refugiados y campamentos improvisados donde esperan la respuesta y ayuda de los organismos internacionales para reubicarlos.
[button link=»» color=»bordeaux» icon=»» size=»large»] Gente que hace [/button]
Pude conocer de cerca algunas iniciativas que, quién sabe, pueden resultar Inspiradoras… Argentina es un país que se vuelca y que ha sabido socorrer en situaciones críticas. En general, los países latinoamericanos estamos en buenas condiciones para acoger, ya que nuestras naciones se han formado recibiendo inmigración de distintas razas y credos, integrándose al todo social.
[button link=»» color=»bordeaux» icon=»» size=»large»] Refugees team #teamrefugees [/button]
Desde que los Juegos Olímpicos modernos comenzaron en 1896, más de 200 equipos nacionales han competido por alcanzar la gloria en los deportes de verano e invierno. Por primera vez, el Comité Olímpico Internacional seleccionó a 10 deportistas -dos nadadores sirios, dos judocas de la República Democrática del Congo, un maratonista de Etiopía y cinco corredores de media distancia de Sudán del Sur- que formaron el Equipo Olímpico de Atletas Refugiados.
Yusra Mardini, nadadora siria, tuvo que interrumpir sus entrenamientos y huir. Después de atravesar varios países, pagaron a unos traficantes para que los cruzaran a la isla de Lesbos, “la puerta de Europa”.
Al poco de zarpar, la barcaza comenzó a hundirse. Ella y su hermana sin dudar se tiraron al agua seguidas por otras dos personas que venciendo el miedo y el frío remolcaron la “patera” hasta la costa. Así salvaron a sus 20 compañeros de viaje. Yusra y su hermana fueron refugiadas en Alemania, donde ella continuó su entrenamiento. Llegó a Río como todos, con el sueño del oro. Ganó una de las series clasificatorias en 200 metros libres.
+ Info: www.teamrefugees.com
[button link=»» color=»bordeaux» icon=»» size=»large»] Invirtieron su fortuna [/button]
Christopher y Regina Catrambone respondieron a un llamado del Papa Francisco a rezar por las víctimas del Mediterráneo que pierden sus vidas intentando llegar a tierra firme desde el continente africano.
NO HUBO UNA SOLA PERSONA EN LA SALA
QUE NO SE QUEBRARA FRENTE A LA VALENTIA
Y ENTEREZA QUE MOSTRABA ESTA NIÑA
CONVERTIDA EN MUJER A LA FUERZA
Esto provocó un gran revuelo en sus vidas. Él, maltés; ella, italiana… Decidieron hacer algo por los náufragos e invirtieron parte de su fortuna personal en adquirir una embarcación de rescate (Phoenix) y dotarla de toda la tecnología y los elementos necesarios para que funcione a modo de “ambulancia”. Su objetivo era asistir a los miles y miles de náufragos que recibe el Mediterráneo. En los primeros 60 días en el mar, colaboraron en el rescate de 3.000 personas. Hoy suman más de 24.000. El proyecto se llama MOAS y abren las puertas de su organización a quienes quieran sumarse al rescate de miles de personas que están dejando sus países porque su vida y su libertad corren riesgo.
+ Info: www.moas.eu
[button link=»» color=»bordeaux» icon=»» size=»large»] Idomeni. Centro cultural en un campo de refugiados [/button]
Un grupo de voluntarios instalaron un espacio lúdico en Idomeni, una localidad griega que hace frontera con Macedonia. Allí los refugiados ponen distancia de la terrible realidad que los rodea.
Maisda Turki es hija de una catalana y un sirio y desde hace más de 30 años vive en España, donde Jadan, su padre, llegó para estudiar en la facultad.
Maisda fue criada en una familia donde convivían dos religiones, dos culturas, dos idiomas, donde Oriente y Occidente se moldean fruto del amor. Mantuvo siempre el vínculo con el país y la familia de su padre. De hecho, estaba en Damasco trabajando como intérprete cuando estalló la guerra civil en el 2012. Sus padres la sedujeron con un pretexto para que regresara a España, porque ella no creía las advertencias sobre el avance de la guerra en Alepo, la segunda ciudad más importante de Siria.
El viaje de Maisda fue un viaje sin vuelta. Se hizo voluntaria independiente. Pasó un mes en Idomeni ayudando en la fundación de este centro que es un espacio educativo para los refugiados.
Hoy vive en Barcelona, donde replicó la idea para los que pidieron asilo y es el punto desde donde se coordina y distribuye la ayuda humanitaria que recolectan. Su corazón está con todos los familiares y amigos quedaron allá.
+ Info: @openculturalcenter