Videojuegos OK – compartis tiempo y aprendizaje

Abundan noticias de niños que han llevado a sus padres a la quiebra por apuestas impagables en sus juegos e, incluso, se conoce la información acerca de chicos que llegan al suicidio por no lograr procesar la frustración que les genera perder en un juego o al conocer el desastre económico al que arrastran a su familia.

Por eso nunca está de más estar alertas cuando los chicos entran en los videojuegos. Y ese “estar alertas” no significa prohibir si no conocer, comprender y acompañar.

Así como se advierte y se intentan evitar juegos de acción y violencia, muchas veces desmedidas, también vale la pena poner atención en todos aquellos que potencian las habilidades sociales, el pensamiento lógico o estratégico acordes a la edad.

SUGERENCIAS POSITIVAS

Elegir videojuegos que estimulan y mejoran su capacidad creativa, como los de ficción. Esos juegos en los que todo es imaginario: los personajes, el ambiente, la historia.

Muchos juegos estimulan la percepción sensorial y la coordinación motora, por ejemplo los que simulan actividades deportivas.

Además, como la dificultad va en aumento de manera que se requiere mayor habilidad para superarlo. Entonces, el niño crece en confianza y auto estima. Así aprenden que se puede mejorar “poco a poco”.

Otro aspecto valioso de los videojuegos es la forma en que estimulan la toma de decisiones y la resolución de problemas en contextos diferentes.

Para esta toma de decisiones, habrán desarrollado su capacidad de razonamiento lógico para resolver problemas y encontrar soluciones en forma pragmática y racional.

Desde la plataforma, los niños se van capacitado para resolver problema de la vida cotidiana, y fomentan su capacidad de raciocinio fuera del ámbito escolar.

NO LOS DEJES SOLOS

Estos juegos son una buena oportunidad para compartir tiempo de juego y entretenimiento, los padres no estarán para “controlar” a qué juegan, sino para acompañar y educar desde el entretenimiento. Por ejemplo, “jugamos” con reglas claras y así desarrollan su auto control, las limitaciones de tiempo, en definitiva crecen en responsabilidad.

Obviamente, en la medida de lo posible y confiable el dispositivo tendrá las limitaciones de accesos convenientes, mientras los padres “se atreven” a desafiar a los hijos compartiendo gustos y tiempos.

La familiaridad con la tecnología, muchas veces es más propia del hijo que de los padres, así que sin problemas ni vergüenzas, aprendemos juntos.

Jugar juntos «empatiza».

Si antes decíamos que aprendíamos de los hijos… bueno ahora mucho más.

Fuente: Family & Media NL 5-2024

Sugerencias: https://www.latercera.com/practico/noticia/los-5-mejores-videojuegos-colaborativos-para-padres-e-hijos/HFK4D7AIR5D3ZB5RP3HXXWBNUE/

foto children’s health

 

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *