Presencialidad vs Virtualidad

Quería compartirles un actículo sobre la presencialidad versus virtualidad que está ocasionando cambios de colegio inesperados y desesperados, amén de la ausencia de consenso o unidad de criterio. Mgr. María Elena Bertorello*

En la Provincia de Buenos Aires y algunos colegios de CABA dependientes de la Nación se produjo a nivel social una migración inédita y silenciosa. Muchas familias han debido -momentáneamente- cambiar de colegio a sus hijos en busca de presencialidad. Pareciera que la escuela fuera una suerte de agua viva sin la cual no pueden estar. Y ciertamente, es así.

Más allá del descalabro que esto produce a nivel familiar e institucional se está propiciando el vaciamiento de algunas instituciones mientras otras se están recargando, con las consecuencias lamentables que eso trae. Estas decisiones, muchas veces producto de una situación desesperada, buscan dar solución a problemas ajenos a la agenda escolar, familiar e insitucional. La sociedad entre dos fuegos. entre el tironeo de voluntades.

La escuela fuera una suerte de agua viva sin la cual no pueden estar. 

¿Qué piden las familias y para qué?

Piden la posibilidad de que sus hijos interactuen y se socialicen con otros. Piden Igualdad de condiciones con respecto a otros niños del propio espacio territorial, que asisten presencialmente a la escuela. Piden la riqueza que otorga la escolaridad presencial en contrapartida con la escolaridad virtual. Para niños de grados inferiores y sobre todo Nivel Inicial y Maternal, la Escuela Presencial es mucho más vivencial y absolutamente necesaria. Piden canalizar sus emociones a través de la huella maravillosa e insoslayable que deja la escuela.

Piden la riqueza que otorga la escolaridad presencial vs la escolaridad virtual.

Ojalá esta situación pueda contemplarse y encontrar una salida equitativa con la igualdad de oportunidades para todos. No es fácil transitar estas decisiones ni para las familias, ni para las instituciones. Trabajemos para construir una sociedad más colabortiva en la que conformemos un mismo equipo, vivamos bajo la misma bandera celeste y blanca que nos cobije y proteja a todos, con equidad de oportunidades y con soluciones que sean producto de acuerdos, ¡que concilien en lugar de dividir!

*Es Profesora de Nivel inicial y en Cs. de la Educación

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